Me atreví a vaticinar y fallé
Al inicio del 2022, casi dentro de la curva descendente de la emergencia sanitaria que afectó al mundo, fui invitado a participar en un podcast sobre propósitos para el nuevo año.
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Imágen: Pixabay.com |
Sin embargo, aunque eso es cierto y como
oportunidad de negocio es bueno tener un escenario donde la demanda sea siempre
constante y consistente, había una variable que, aunque ya se previa difícil
para el mundo, no se sabía de sus prontas consecuencias y daños, me refiero al
clima.
Ya, en 2018 el Grupo Intergubernamental
sobre el Cambio Climático de las Naciones Unidas, el IPCC, emitía, en su
informe, lo que llamaron “la última llamada” para salvar la tierra, e indicaba
que faltaban sólo once años para tomar decisiones drásticas.
Sin embargo, este año 2022 está
rompiendo records en cuanto a las altas temperaturas y los niveles muy bajos en
los afluentes de agua en muchos países del mundo. En este sentido, los desafíos
son cada vez más grandes, porque altas temperaturas y poca agua implica pocos
alimentos para la humanidad.
Personalmente, no soy ningún tipo de gurú que prediga
el futuro, sin embargo, al estar observando los acontecimientos y las
decisiones de los líderes de las naciones más grandes del mundo, uno puede
darse cuenta de alguna tendencia y las probables consecuencias con respecto al
cambio climático, es muy poco lo que se puede decir, especialmente ahora,
porque ellos están ocupados en las guerras y el abastecimiento de combustibles
para enfrentar el actual verano y el próximo invierno.
En conclusión, mi predicción sobre que la industria de
alimentos era un buen nicho para invertir creo que fue un atrevimiento muy
grande de mi parte, porque, aunque visualicemos el futuro próximo, los cambios
son tan acelerados que las predicciones, hoy más que nunca, no son muy certeras
y ya lo decía Santiago en su carta:
¿Cómo
saben qué será de su vida el día de mañana? La vida de ustedes es como la
neblina del amanecer: aparece un rato y luego se esfuma. Lo que deberían
decir es: «Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello». De lo
contrario, están haciendo alarde de sus propios planes pretenciosos, y
semejante jactancia es maligna.
Santiago
4:14-16
Como creyente, ¿qué visualiza usted en el futuro
próximo, es decir, en el 2023 y el 2024?, no hay duda que son los dolores de
parto más intensos (Mateo 24:8), sin embargo, en medio de lo que viene, habrá
que tomarse más fuertes de la mano del Señor y leer y releer a este mismo
evangelista, cuando registró otras palabras de Jesús:
Así
que no se preocupen por el mañana, porque el día de mañana traerá sus propias
preocupaciones. Los problemas del día de hoy son suficientes por hoy.
Mateo
6:34, NTV
Ahora, ya no me atrevo a vaticinar nada, pero, aunque
por prudencia no lo haga, no puedo cerrar los ojos e ignorar lo que se viene y
es probable que me quede corto en cualquier consecuencia difícil que visualice.
Misericordia, Señor, misericordia para este mundo hoy.
Bibliografía
Millet, E. (18 de
agosto de 2019). 11 años para salvar el planeta. La Vanguardia. Recuperado
el 25 de agosto de 2022, de
https://www.lavanguardia.com/magazine/experiencias/11-anos-para-salvar-planeta.html#:~:text=Once%20a%C3%B1os%20es%20el%20tiempo,de%20h%C3%A1bitos%20de%20la%20ciudadan%C3%ADa
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